Durante estos meses, hemos visto cómo el ahorro energético se ha convertido en una prioridad. Por ello, hay consejos que puedes poner en práctica para evitar que la factura de la luz siga subiendo desmesuradamente. Descubre en este artículo cuál es el electrodoméstico que más gasta.
Para elegir un buen electrodoméstico, debes tener en cuenta el consumo energético. Este dato lo puedes encontrar en las pegatinas que incluyen cada uno de los aparatos. Pero también es importante saber cuáles son los que, generalmente, tienden a necesitar más energía.
Estos dos aparatos son de los que menos consumen. El gasto medio energético oscila entre los 175 kWh y 250 kWh al año. Para evitar gastos innecesarios, podemos desactivar la opción stand-by del televisor y usar el lavavajillas en tramos valle.
Este electrodoméstico debe ser de buena calidad, ya que no es un aparato que consuma mucha electricidad. Pero si se adquiere uno económico, el consumo de energía se puede ver incrementado.
Por estar encendido las 24 horas del día, es el electrodoméstico que mayor porcentaje del consumo de nuestra factura se lleva. El consumo medio es de 425 kWh al año. Ocurre lo mismo que con el anterior electrodoméstico, se debe adquirir de buena calidad y con la mejor calificación energética. De esta manera, no tendrás una gran subida en tu factura de la luz.
El microondas gasta más del doble que la nevera. Su consumo medio es de 1100 kWh al año. Este gasto lo podemos reducir ajustando la potencia que se necesite para cada caso.
La vitrocerámica es uno de los electrodomésticos de más gasto energético. Consume una media de 1450 kWh anualmente. Debes escoger una vitrocerámica de calidad y con la mejor calificación energética, que te permitirá ahorrar de forma considerable.
Este electrodoméstico puede llegar a gastar 1600 kWh. En consecuencia, a la hora de comprarlo debes escoger uno que disponga de la mejor calificación energética. Al elegir un buen modelo, su coste será más alto, pero será la mejor opción a largo plazo, ya que en la factura de la luz se verá reflejado ese gasto menor.
Es uno de los aparatos que más tiempo permanece encendido. Este electrodoméstico puede llegar a gastar 1950 kWh al año. Este consumo lo puedes reducir con tan solo tener bien aislado tu hogar de posibles fugas y por su ubicación en la casa.
Después de ver cuáles son los electrodomésticos que más consumen, te mostraremos varias prácticas para disminuir el gasto energético en tu vivienda. Recuerda, por otro lado, que existen ayudas a la rehabilitación energética.
Antes de comprar tu electrodoméstico, debes tener en cuenta la eficiencia energética. Como te hemos dicho, se muestra en una pegatina del electrodoméstico, en la que puedes ver el gasto de kWh al año. La letra A es la mejor opción y las demás tienen un mayor gasto energético.
Debes tener en cuenta el uso que le vas a dar a los aparatos. Si los utilizas de forma esporádica o no. Un buen ejemplo es la plancha del pelo. Si se utiliza de vez en cuando, no será el principal causante de las facturas elevadas de luz.
Si estás en el mercado regulado, ten en cuenta también las horas valle para utilizar tus electrodomésticos. Durante esas franjas horarias, la luz es más económica y podrás aprovecharla para poner en funcionamiento aparatos como la lavadora, la secadora o el lavavajillas.
El aislamiento en tu vivienda es un factor importante que influye a largo plazo en la factura de la luz. Con unas ventanas bien selladas y puertas herméticas, no entrará por ninguna zona el frío o el calor, dependiendo de la estación del año que sea.
Para gastar menos en iluminación, debes cambiar las bombillas convencionales por otras de bajo consumo como las de leds. Gastan menos de la mitad que las convencionales. Además, deberías aprovechar la luz natural al máximo, colocando los escritorios, zonas de lectura o de trabajo cerca de las ventanas.
Antes de elegir la tarifa de luz, deberías investigar cuál es la tarifa de luz más económica. Hay que tener en cuenta el kWh, la potencia contratada y, sobre todo, los hábitos de consumo.
En conclusión, como puedes observar, tienes la opción de realizar una serie de mejoras en tu factura de la luz sin invertir. Con el simple hecho de cambiar las bombillas, saber cuál es el electrodoméstico que más gasta y tener tu hogar bien aislado, puedes ahorrar mucho.