¿Necesitas una cuenta bancaria para administrar tu dinero? Te contamos el paso a paso para hacerlo y los requisitos habituales.
Abrir una cuenta bancaria es un proceso muy sencillo y común. Gracias a ella, podrás administrar tu dinero de forma cómoda, hacer frente a pagos con pocas molestias y ahorrar.
El proceso para crear una cuenta ha ido mejorando y se ha vuelto más fácil con el paso de los años. Hoy en día, puedes acudir a las oficinas de tu entidad o hacerlo por vía telemática. Estos son los pasos que debes seguir:
Pese a que abrir una cuenta es sencillo, necesitas cumplir una serie de requisitos. Uno de los más importantes es facilitar tus datos personales y verificar quién eres, en especial si haces el proceso por medios electrónicos.
Además de esto, algunos bancos solicitan documentos como una nómina o un justificante de domicilio como, por ejemplo, una factura de la luz. Su objetivo es reducir el riesgo de caer en un fraude.
Por otro lado, se suelen realizar varias preguntas. Las más frecuentes estarán relacionadas con tu situación laboral, la empresa en la que trabajas o si tienes obligaciones fiscales en el extranjero. Como ocurre en otros casos, las cuestiones varían de un banco a otro y tienen un origen legal, por lo que estás obligado a responderlas.
En caso de estar fuera de España, tienes que preguntar a un banco del lugar si se te permite crear la cuenta. Aunque existe la posibilidad de que respondan con una negativa, la misma entidad puede ofrecerte otros productos especiales dirigidos a personas no residentes.
Sin embargo, en España basta con disponer de un pasaporte para que un no residente abra una cuenta, pero habrá que aportar diversos documentos, como uno que indique la fuente de ingresos, certificado de no residencia o un escrito que muestre su situación. Por lo demás, se solicitará un método de contacto y el domicilio actual.
Por último, hemos de comentarte que, aunque la edad legal para abrir oficialmente una cuenta en el banco son los 18 años, algunos dan la posibilidad de abrírsela a un menor. En ese caso, te solicitarán más documentación como representante legal y serás el responsable de su buen uso.
Existen dos canales principales para llevar a cabo el procedimiento: la sucursal o la página web o app de la entidad. El primero es el método tradicional y un trabajador te apoyará en todo momento. En cuanto al segundo, es una modalidad que ha ganado popularidad y que se tiende a potenciar. Para conseguirlo, las entidades ofrecen ventajas exclusivas y regalos.
Elijas el canal que elijas, procura cumplir con los requisitos. Eso sí, puedes quedarte tranquilo, pues el proceso no será largo ni complicado; es más, lo finalizarás en unos pocos minutos.
Si has decidido abrir la cuenta a través de Internet, debes tener presentes estos requisitos:
Hay varios datos que merece la pena comprobar cuando vas a abrir la cuenta. Uno de ellos son las comisiones que pueda tener aparejada, ya que van a ser gastos recurrentes. Luego están las condiciones de permanencia, que varían de un banco a otro, y la vinculación exigida. También hay que revisar qué ocurre si te quedas sin dinero o si se dan regalos de bienvenida.
Si vas a cambiar de banco, tienes la posibilidad de llevar la cuenta contigo. Se trata de una gestión sencilla, rápida y que se suele hacer sin coste alguno en la entidad. Así, ganas en comodidad y te puedes despreocupar de lo demás.
Como ves, abrir una cuenta bancaria no tiene ningún misterio. Solo has de cumplir los requisitos que te piden, que están al alcance de todo el mundo, y elegir el producto que más te conviene. Incluso puedes cambiar las que ya tengas de un banco a otros sin mayores complicaciones.