Hipotecas y euríbor, ¿cuál es la relación entre estos dos factores?

Hipotecas y euríbor, ¿cuál es la relación entre estos dos factores?

¿Qué es el euríbor?

Estar al tanto de qué es el euríbor te ayudará a entender mucho mejor cómo afecta a lo que pagas por tu hipoteca. Básicamente, es el tipo de interés que se aplica en las operaciones entre bancos dentro de la Unión Europea. Dicho en otras palabras, los intereses que un banco le abona a otro cuando este le presta dinero.

En realidad, no es un tipo de interés único, sino una media que se obtiene atendiendo a los tipos aplicables dentro de un determinado período.

Más allá de eso, el euríbor debes conocerlo porque es el tipo de interés al que están referenciadas una gran parte de las hipotecas a tipo variable que se conceden en España.

Hipotecas y euríbor, ¿cuál es su relación?

Los préstamos hipotecarios pueden ser a tipo fijo, variable o mixto (mezcla las dos modalidades anteriores). Los primeros tienen un tipo de interés que se fija desde el inicio del préstamo y no cambia durante toda la vida del mismo, mientras que los segundos fijan su tipo de interés cada año, con base en un valor de referencia o índice.

En un préstamo a interés variable, el consumidor no sabe a lo largo de toda la vida de la operación cuánto va a pagar realmente por el dinero que le está pidiendo a la entidad bancaria porque no tiene forma de saber cómo evolucionará el índice de referencia.

Precisamente, el euríbor es un índice de referencia que se utiliza en muchas ocasiones para actualizar los tipos de interés en los préstamos hipotecarios, a fin de ajustarlos a la realidad del mercado en cada momento. No obstante, debes tener en cuenta que los intereses que pagas en una hipoteca a tipo variable no solo dependen del índice de referencia. También se aplica un diferencial, que es un porcentaje fijo que se suma siempre en un índice.

Hipotecas y euríbor, ¿cuál es su relación?

Por ejemplo, si ahora mismo el euríbor estuviera a un 2% y el diferencial que te ofrece el banco es de un 0,5%, los intereses que tendrías que abonar hasta la siguiente actualización serían un 2,5% sobre el capital pendiente de pago.

De todo esto, extraemos una conclusión aplicable cuando debemos calcular la cuota de hipoteca con euríbor. Si este es el índice de referencia aplicado en tu hipoteca, si sube o baja, la cuota mensual que pagas para amortizar el préstamo también lo hará. Sin embargo, los cambios no se producen todos los meses. La periodicidad depende de la clase de revisión hayas pactado con tu banco, anual o semestral. Lo que se hace entonces es recalcular la cuota de hipoteca en función de cómo haya cerrado el euríbor de media el mes anterior a la actualización.

¿Cómo se calcula el euríbor?

Cada día, sobre las 10:45 de la mañana, los bancos del panel (los que tienen mayor peso en la zona euro) envían a la agencia Reuters la información sobre los tipos de interés que están aplicando en los préstamos internos.

La agencia Reuters elimina el 15% superior y el 15% inferior y con el resto de valores calcula la media, la cual constituye el euríbor oficial. Sobre las 11:00 de la mañana, esta información se hace pública para cada uno de los plazos definidos: euríbor a una semana, un mes, tres meses, seis meses y 12 meses. En el caso de España, la información se publica en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

La evolución del euríbor en los últimos años

Antes de la crisis económica, este índice de referencia solía estar ligeramente por encima de los tipos de interés aplicables en el mercado. Esto provocó una subida constante de las cuotas de préstamos hipotecarios durante años.

Después de varios años en los que ha estado en negativo, el euríbor ha vuelto a ser positivo en las últimas semanas. Habrá que esperar a ver la evolución de la inflación y de la guerra en Ucrania para ver si se confirman las expectativas de nuevas pequeñas subidas en el corto plazo.

Seguro que ahora entiendes mucho mejor la relación entre hipotecas y euríbor y ya sabes por qué la cuota puede subir o bajar. No obstante, ten en cuenta que no es esta la única alternativa que existe. También se pueden aplicar otros índices de referencia e incluso puedes contratar una hipoteca a tipo fijo, que no se verá afectada por los cambios de valor de un índice.