Esquiar es una actividad emocionante y gratificante, pero también conlleva riesgos. Preparar a tus hijos para esquiar solos es un proceso que requiere tiempo, paciencia y enseñanza constante. Al enfocarse en la seguridad, la responsabilidad y el respeto por las reglas, los jóvenes de la casa pueden disfrutar de las pistas de esquí de forma independiente.
Según la Federación Internacional de Esquí, la mayoría de los accidentes en pistas ocurren por colisiones con otros esquiadores o por no controlar la velocidad. Enseñar a tus hijos sobre la importancia de la seguridad en las pistas es fundamental para prevenir accidentes. Moderar la velocidad, prestar atención en los cruces de pistas, no salir fuera de pista y respetar al resto de usuarios pueden ser las bases de una experiencia fabulosa en una estación de esquí sin asumir riesgos innecesarios.
El equipo de esquí debe ser adecuado para el tamaño y habilidad del adolescente. Esto incluye esquís, botas, bastones, casco y gafas. Un casco de talla adecuada es esencial, ya que reduce el riesgo de lesiones en la cabeza en caso de caídas o colisiones. También llevar una protección dorsal pegada a la primera capa, puede ser útil para evitar contusiones y lesiones en la columna.
Contar con monitores de esquí titulados para que tus hijos aprendan a esquiar puede enseñar a los hijos técnicas adecuadas y cómo reaccionar antes las diferentes condiciones de las pistas. Quizás este punto sea de los más importantes para aumentar su seguridad y confianza en las pistas de esquí. Los argumentos más útiles para que tomen clases pueden ser: convencerles de que gracias a las clases tendrán un aprendizaje acelerado, aprenderán técnicas y trucos que les permitirán disfrutar más de la experiencia y además socializarán con nuevos amigos con intereses similares.
A medida que los hijos ganan habilidades, es importante darles la oportunidad de esquiar solos en pistas adecuadas para su nivel. Esto desarrolla su autonomía y les enseña a tomar decisiones responsables. Si se llega a un consenso a nivel familiar, puede ser útil que vuestro hijo active la localización del móvil o incluso utilizar aplicaciones que permiten compartir entre un grupo, la posición en tiempo real en pistas. De esta forma, sabrás en todo momento donde está tu hijo y podrás disfrutar de la nieve sin estar preocupado. Os recomendamos Safe 365 (Alpify), SkiTracks y TraceSnow, aunque si estás esquiando en las estaciones de esquí de Aramon sin duda debéis instalar la App Aramon, que ha sido renovada y ahora ofrece multitud de nuevas funcionalidades.
Las condiciones en montaña son muy cambiantes y, a pesar de que las estaciones de esquí de Aragón son muy seguras, es fundamental que nuestros hijos aprendan a reconocer las condiciones peligrosas como hielo, nieve profunda o mala visibilidad y cómo actuar en estas situaciones. Conocer las previsiones sobre las condiciones meteorológicas que vamos a encontrar en la estación y acceder a las webcams de diferentes zonas del dominio esquiable, ayudarán a vuestro hijo a ser previsor y anticiparse.
Tus hijos deben conocer un plan de emergencia, incluyendo cómo contactar a los servicios de rescate y qué hacer si se pierden o se lesionan. Existen normas básicas como conocer el mapa de la estación de esquí, las rutas de evacuación, familiarizarse con la señalización de las pistas o asegurarse de tener un teléfono móvil con batería cargada para que os puedan contactar o llamar directamente al 112. También es útil disponer de números de contacto directo de la estación de esquí en la que te encuentres. Estos números suelen estar disponibles en mapas de la estación, señalizaciones y en la página web oficial de la estación.