Elegir inversiones en tiempos de incertidumbre

El aumento de los costes de producción afecta también a grandes corporaciones

A la hora de analizar empresas en las que invertir, siempre buscamos aquellas que gocen de ventajas competitivas sostenibles en el tiempo, es decir, que se puedan beneficiar durante un periodo de tiempo largo de una posición ventajosa sobre el resto de los competidores y que operen en un mercado o segmento que tenga crecimiento estructural. Empresas en buena situación y en un mercado en crecimiento.

Una de las ventajas que tienen estas empresas es el poder de fijación de precios de sus productos. Sin embargo, no es lo mismo tener ese poder en un mercado normalizado, en el que todo sigue un curso estable, que en un mercado como el actual, con una inflación descontrolada debido en gran parte a las consecuencias de los cierres de los países y el atasco del comercio global.

En estos momentos, podemos encontrarnos con empresas de reconocido prestigio que siguen funcionando así, manteniendo el poder de fijar precios y pudiendo trasladar a sus productos las subidas correspondientes al aumento de los costes de producción: eso es así porque sus clientes tienen una gran fidelidad a su marca.

Sin embargo, otras marcas también muy valoradas no son tan capaces de trasladar el incremento de sus costes de producción al precio de los productos que venden, bien porque son productos de consumo básico o bien porque la renta de sus clientes ha disminuido debido al coste de la vida, dejando a sus productos en un nivel de prioridad secundario.

Todo esto hay que tenerlo en cuenta a la hora de elegir las empresas en las que invertir y a la hora de decidir si mantener o no las inversiones hechas. Como siempre, lo más importante es mantener el plan de inversión, definido siempre con base en unos objetivos que se mantienen en el tiempo. Y tener claro que todas las crisis son pasajeras, todo cambia para que nada cambie.